Bien por la edad o por un mantenimiento deficiente a lo largo de los años, lo cierto es que las arrugas de la piel del rostro pueden presentar una profundidad más o menos pronunciada. La pérdida de elastina y los bajos niveles de colágeno pueden acentuar esta profundidad, haciendo que las arrugas profundas sean con el tiempo más difíciles de combatir.
La menopausia viene acompañada de cambios y desajustes hormonales que pueden tener un impacto muy alto en la piel. sequedad, pérdida de densidad, flacidez, arrugas más marcadas, piel más fina y frágil...
Cada vez es más evidente que la cosmética para la menopausia puede jugar un papel determinante a la hora de mantener en condiciones óptimas de la piel, ya que cuentan con numerosos principios activos que pueden mejorar el estado de la piel, contribuyendo a aumentar su nivel de firmeza, elasticidad, resistencia y a estimular la producción de colágeno.